Cuando planeamos una boda, las conversaciones y desvelos giran en torno al vestido de la novia. No obstante, no debemos subestimar la importancia de los zapatos porque ellos hablan de la personalidad de la contrayente.
¿Qué debemos tener en cuenta cuando elegimos los zapatos de novia?
1 – Llevar los zapatos de la ceremonia a partir de la primera prueba del vestido.
La altura del taco determinará la longitud del vestido. Por esta razón, es recomendable que la novias adquieran o tengan prontos los zapatos que van a lucir en su boda para la primer prueba del vestido. El mismo criterio se aplica si opta por adquirir uno ya confeccionado.
El mejor momento para probar y comprar zapatos es al final del día porque nuestros pies tienden a hincharse con el transcurso del día.
2 – La comodidad sobre todo lo demás.
Esta es la regla más importante a la hora de adquirir calzado. La clave consiste en encontrar un par de zapatos a cuya altura y modelo la novia esté acostumbrada.
En el día de su boda la novia pasará prácticamente de pié. Si lleva zapatos incómodos las fotos reflejarán dolor en su rostro y los pies se llenarán de ampollas. Sólo debe optar por zapatos o sandalias de taco alto y fino si está habituada a ellos y si camina sobre tacos con seguridad y solvencia
3 – Zapatos reusables.
Si bien una boda marca un acontecimiento especial en la vida, no es necesario comprar zapatos que nunca más se vuelvan a usar, sobre todo cuando significaron un desembolso importante de dinero. Por esta razón, es preferible optar por modelos de diseños atemporales, con los que la novia se sienta identificada y esté acostumbrada a su uso.
Sandalias Roger Vivier
4 – Los zapatos deben guardar relación con la locación de la boda y el diseño del vestido.
El zapato debe adaptarse al tipo de suelo en el que se desarrolle el evento. Si se trata de un casamiento en la playa o al aire libre sobre césped se debe descartar todo zapato de taco fino que se entierre en la arena o en la tierra y, en cambio, considerar un par de sandalias planas o ballerinas. Los tacos finos deberían reservarse para salones con pisos de madera o cualquier otro material rígido.
El zapato debe complementar al vestido porque es una extensión del mismo. Si la novia se inclina por lucir zapatos ornamentados, los adornos deben ser similares a los del vestido para lograr un conjunto coherente y armónico.
Sandalias joya de Bella Belle
Ballerinas de Roger Vivier
5 – El color del calzado
Si no es del agrado de la novia llevar el clásico calzado blanco o marfil, puede decantarse por otros tonos claros como nude, dorado o rosa pálido. También es una magnífica oportunidad para seguir la costumbre de vestir “algo azul” llevando zapatos de este color en sus distintas tonalidades y, si quiere hacer una declaración de principios fashionistas, en cualquier otro color con el que se identifique.
Stilettos modelo Eden de Ralph & Russo
Roger Vivier Modelo Dorsay con Strass
Manolo Blahnik modelo Decebano
6 – “Prohibido” estrenar los zapatos en el día de la boda.
Los zapatos nuevos pueden causar molestias y llagas. Es recomendable usarlos durante las semanas previas a la boda para estirar y ablandar los zapatos y así, adaptarlos a los pies.
7 – El segundo par.
Cada vez son más las novias optan por cambiar los zapatos de la ceremonia por otros más bajos e incluso algunas los sustituyen por un par de sneakers para disfrutar y bailar sin parar con comodidad, estilo y lo más importante, sin sufrir!
Sneakers modelo Vieira Orlato de Christian Louboutin
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