La pasión por la pastelería es casi un don para quienes encuentran en ella una forma de expresar su creatividad. Angie Ferraz es una joven mamá que ha desplegado su fascinación por los dulces y especialmente las tortas, transformándose en una emprendedora del rubro.
Todas las pasiones se nos despiertan en momentos de búsquedas y más aún de plenitud. Eso fue lo que vivió esta pastelera en 2013, cuando a partir de la torta de bautismo de su hija encontró un mundo donde desarrollar una profesión.
“En ese momento la idea era de hobby y desenchufe y comencé a tomar clases de confitería”. A la fascinación inicial le siguió el apoyo de su marido, el conocido conductor de televisión, Guillermo Lockhart con quien tiene dos hijos: Elena Soledad de 6 años y Milo Guillermo de 4.
Necesitaba profesionalizarse así que para comenzar con este camino hizo la carrera de Pastelero Profesional en Gato Dumas y luego viajó a Barcelona al atelier de Cake Haute Couture de Patricia Arribalzaga. Hubo muchas horas de prueba y tortas a amigos y familiares, que como práctica fueron esenciales. En 2015 abrió su página de Facebook y vendió su primera torta a un desconocido. Sin duda, ese fue el nacimiento de Ferraz Pastelería de Diseño como emprendimiento.
Desde ese día hasta ahora no ha parado más y hoy por hoy se dedica 100% a la pastelería profesional, haciendo incluso trabajos para famosos del medio que la buscan para tener el broche de oro en sus celebraciones especiales. Claudia Fernández, Miska Gargano o Paula Silva fueron algunas de las figuras que optaron por sus servicios.
El cuidado por la estética y la búsqueda del diseño es su mayor fortaleza. “Soy muy detallista y autoexigente, los pisos altos y las líneas rectas conocidos como bordes filosos son muy mi estilo”, comenta Angie, quien cree que la torta puede ser moderna sin perder la creatividad y la elegancia. En cuanto a su estilo, le gusta acompañar con dulces o técnicas que son tendencia, como drips o macarrons, apostando por juegos de torta antes que tortas de pisos, para salir de lo común y plantear un hilo conductor entre todos los dulces y la celebración. Pastelería de diseño, concretamente.
Al principio, empezó haciendo tortas y postres. Hoy solo hace tortas y sus complementarios para mesas dulces como cupcakes, chocolates, macarrons, donuts y otros. “La diferencia es que los postres y este tipo de pastelería se trabajan totalmente distinto”, así que ha preferido abarcar de lleno lo que la hace sentir más cómoda, adaptando su cocina a ello.
En cuanto a gustos, coberturas, baños y técnicas Ferraz Pastelería de Diseño conoce a su público. “El uruguayo es muy clásico, piensa que las tortas son todas iguales y muchos creen que la torta no se come”. Esa falta de conocimiento le permite educar al consumidor que la consulta y hacerle saber que en cada piso o nivel de torta que elija puede tener la experiencia de un postre. Para ello Ferraz Pastelería de Diseño trabaja con una carta de opciones de sabor que van desde el clásico dulce de leche con chips a torta de coco rellena de curd de maracuya y chocolate blanco, o una delicia como el mix de banana y nuez; aunque la estrella de esta pastelería es la chocotorta negra con praline de almendra.
En las tortas de boda, que son en las que más arriesga, se usan sabores como red velvet o carrot cake que son muy pedidos por la gente.
“En lo que es cubiertas me siento muy cómoda trabajando con ganache. Se logran colores y efectos muy buenos y su sabor es delicioso. Muchos creen que mis tortas son de buttercream pero la verdad es que no me gusta el sabor”. De ser necesario, también trabaja en fondant, aunque ya no se usa tanto este tipo de cobertura.
“El diseño y ambientación de mesas dulces con deco solo lo hago para mis hijos”. Le gusta y disfruta mucho el imaginarse una idea integral y ver sus resultados, “pero lleva mucho tiempo y dedicación” lo que le hace imposible abarcar todo como parte del negocio. Sus mesas de dulces incluyen la torta principal y todo lo que tenga que pasar por la cocina. En general, las mamás comentan su idea y en base a la cantidad de personas o lo que desean lograr, se manejan opciones que incluyen cupcakes a juego, chocolates, macarrons, number cakes, cookies, etc.
Angella Ferraz tiene como materia pendiente acompañar a otras mujeres a transitar un camino similar al suyo. “El proyecto que más anhelo concretar es el de dar clases”. Recibe muchos mensajes por Instagram preguntando si da cursos o hace workshops y sueña con algún día tener su propio espacio destinado a formar «cake-lovers» que encuentren las herramientas y técnicas de vanguardia para lograr sus metas.
