Los puros han formado parte de las celebraciones más importantes, y su consumo se remonta a su introducción por parte de los españoles. La costumbre de celebrar la llegada de un nuevo hijo –sobre todo varón– se origina a fines del siglo 17. Los puros eran escasos, costosos y difíciles de obtener, por lo que se los guardaba celosamente siendo considerados un producto exótico y de lujo, incluso más valioso que el propio dinero. Obsequiar un puro es símbolo de unión, fraternidad y respeto. Para el fumador, es compartir un momento de placer personal, parte de un tesoro que se suele mantener guardado bajo llave para una ocasión especial.
La emoción está vinculada con los puros desde la plantación que depende de factores climáticos, su tradicional producción a mano y su rica e imperturbable historia, hasta su mística como protagonistas en la comunión de líderes y personalidades de éxito a lo largo de la historia. Y lo que comenzó como una celebración a ser una costumbre que luego se formalizó en una tradición para celebrar momentos de gran trascendencia como una graduación, una promoción laboral o buen negocio, o un casamiento.
Si bien la costumbre se ha estado diluyendo en los últimos años, aún se mantiene entre los aficionados. En la actualidad, se encuentra en pleno “revival”, en gran parte gracias al refinamiento del paladar del uruguayo no sólo a través de la creciente calidad de la gastronomía, sino también en cuanto a bebidas destiladas y fermentadas –sobre todo de las cervezas artesanales–, sumándose además el café de especialidad. Este nuevo panorama para los sentidos motiva a explorar nuevos placeres como el disfrute de un buen tabaco.
COMO CELEBRAR UN CASAMIENTO CON PUROS.
Un día tan especial como lo es un casamiento, es motivo de gran celebración. Y la celebración cobra aún más importancia con un elemento tan diferenciador y distinguido como lo es un puro, haciendo del evento un momento muy especial que será recordado toda la vida.
Seguramente el deseo de toda pareja será agasajar a sus invitados con puros de la mejor calidad, pero afortunadamente para el presupuesto, no es una buena recomendación a menos que el dinero lo permita. No todas los invitados fuman puros o saben como disfrutarlos, por lo que las diferencias de matices y fortalezas que ofrecen no serán apreciadas. Aconsejamos dos posibilidades: ofrecer un único puro para todos los invitados por igual, evitando diferencias. La segunda posibilidad es ofrecer dos tipos de puros: un pequeño stock de calidad premium para un grupo reducido de invitados fumadores aficionados que apreciarán las diferencias (por ejemplo, la familia directa de los novios o su grupo de amigos más íntimos), y un segundo puro más económico para los invitados en general, que no sean fumadores o que estarán experimentando un puro por primera vez.
La elección del puro dependerá del presupuesto, determinado por la cantidad de invitados a agasajar. Dependiendo de la marca y la vitola que se elija, el costo puede variar mucho. Deberá ofrecerse una cantidad razonable, al menos para el 20-25% de los invitados.
Se deberá tener en cuenta que en Uruguay rige la Ley Antitabaco que prohíbe fumar en recintos cerrados, por lo que aconsejamos siempre disfrutar de los puros al aire libre para evitar cualquier tipo de problemas, o para los no fumadores podran guardarlo como un fino recuerdo de la celebración.
¿QUÉ TIPO DE PUROS OFRECER?
El puro ideal para esta ocasión, debe ser de fortaleza suave a media y formatos de dimensiones medias que permitan un tiempo de fumada relativamente amplio de entre 30 y 40 minutos, como puede ser una Panetela, Mareva o Petit Robusto, con un cepo 40 o 42 y una longitud de 12 a 15 cm. Las tiendas especializadas podrán asesorar en cuanto a marcas y vitolas para la ocasión, de acuerdo al presupuesto.
La forma más elegante de ofrecer los puros es distribuir los mismos sobre una bandeja en una hilera, eventualmente apilándolos unos sobre otros de forma piramidal. Si los puros elegidos están empacados en cajas de madera, pueden dejarse dentro de las mismas ya que es una presentación original y atractiva, sobre todo si son de marcas prestigiosas.
Deberán ofrecerse además encendedores tipo jet flame (gas butano) para el encendido, cortapuros para hacer el corte y ceniceros. Los puros pueden encenderse con encendedores comunes, pero no es lo aconsejable ya que al tener que mantenerse un tiempo prolongado en uso, sus partes metálicas se sobre calentarán. No se recomienda el encendido con encendedores de benceno (Zippo) o velas, ya que estas fuentes contaminarán el sabor del tabaco. Puede destinarse una mesa especialmente para los puros y los accesorios necesarios para el corte y el encendido.
No hay dudas que combinar un buen puro con una elegante bebida y preparación gastronómica, es motivo de gran celebración por sí mismo.
PUROS & HABANOS
¿Cual es la diferencia entre puros y Habanos? “Habanos” es una denominación de origen, y sólo se le pueden llamar de esta forma a todos aquellos cigarros que se producen exclusivamente en Cuba. “Puros” es una denominación genérica y se les denomina así a todos los cigarros en general, sin distinción en cuanto a su origen.
Más info en : CABANA – Cigar Corner