Esta artesana del bordado lidera en un oficio que tiende a desaparecer. Se dedica más que nada a engalanar vestidos de novias, quinceañeras y de fiesta, logrando que sean tan inolvidables como el acontecimiento para el que han sido diseñados. En el medio se la conoce también como la bordadora de las bandas presidenciales de Tabaré Vázquez y de Luis Lacalle Pou.
Luján domina varias técnicas de bordado, pero a lo que más se dedica es al bordado en pedrería. Conectó con esta profesión desde muy niña ya que su mamá era modista y ella la ayudaba a bordar los vestidos de novia y de quince. A los 16 años empezó a hacer bordados con piedras, ya no solo sobre encaje, sino también en cinturones, fajas y corsets. A los 21 empezó a trabajar para uno de los diseñadores más importantes de Uruguay, con quien permaneció durante 13 años, adquiriendo mucha experiencia; asegura que fue ahí donde más aprendió.
“En 2017 empecé mi emprendimiento propio con pedrería.uy donde comencé a mostrar más mi oficio y a trabajar para más diseñadores”, relata. El bordado es un tipo de trabajo artesanal que está tendiendo a desaparecer, Luján asegura que “al día de hoy somos pocas las que vivimos de este oficio, aunque haya personas que lo hacen por hobby, no se dedican exclusivamente a esto”.
Las tendencias europeas, que marcan la moda año a año en el mundo, siguen usando los bordados artesanales para vestidos de noche o para engalanar prendas únicas con este tipo de oficio que bien podría catalogarse como un arte tanto por su laboriosidad como por su belleza.
Cómo bien lo cuenta nuestra entrevistada, su caso es bastante particular, puesto que es de las pocas bordadoras que se dedican exclusivamente al oficio. Los grandes diseñadores, por lo general, ya ofrecen en sus propuestas a sus clientes vestidos bordados contando con sus servicios, y muchas veces dejando espacio a la creatividad de esta experimentada artesana, con apenas alguna directiva respecto al color o el estilo de pedrería. Corsets, faldas, cinturones o breteles son parte de las propuestas de los grandes diseñadores a la hora de crear esos vestidos de ensueño con los que se vivirán momentos inolvidables. “Me trasmiten esa confianza para que yo pueda trabajar libremente”, enfatiza Luján, agregando que también le ha pasado que a través de su página o su cuenta de Instagram la llaman para pedirle algo parecido a algún trabajo que ya realizó antes, o le mandan alguna foto de internet con ideas de cómo quieren que luzca su vestido.
El proceso de trabajo depende de cada encargo particular. “Un cinto me puede llevar dos o tres días; un vestido completo puede ir desde una semana a dos dependiendo del motivo del bordado (más o menos espaciado, más o menos cargado)”, cuenta. Cuando se trata de clientas particulares hace una muestra primero y con el ok empieza el proceso hasta el final del bordado.
Su trabajo es constante con pedidos durante todo el año, por lo que administrar los tiempos es fundamental sobre todo en los períodos más intensos del año, como suele ser por ejemplo el mes de marzo.
Las bandas presidenciales
Un capítulo aparte merecen las historias del bordado de las últimas dos bandas presidenciales: la del último mandato del Dr. Tabaré Vázquez y la de la asunción del actual Presidente, Dr. Luis A. Lacalle Pou.
“En su momento me contacta María Auxiliadora para ver si podía bordar la banda presidencial de su esposo. Si bien yo conocía la técnica nunca había bordado una, así que le pedí ver la banda anterior y logré hacerla en tiempo y forma. En aquel momento estaba embarazada, con mi mamá internada y por tanto no pude atender mucho a la prensa”, recuerda Luján Soria.
Luego de las últimas elecciones, la contactan de Protocolo de Presidencia para bordar la banda presidencial de Lacalle Pou. “Ellos se encargaron de traer todo el material de España. Recuerda que para la banda anterior Ma. Auxiliadora había hablado con las monjas de la congregación de Oblatas, que eran quienes usualmente bordaban las bandas presidenciales y ellas donaron los materiales. Esta vez, esos materiales debieron ser traídos de afuera y la banda fue bordada en tiempo récord, en aproximadamente un mes”, cuenta la bordadora.
Esta vez, a diferencia de la primera, hubo una gran repercusión mediática de su trabajo, empezando por la reseña histórica del por qué se usa este accesorio simbólico de la asunción de los presidentes que incluso tiene un lugar especial en el museo de Presidencia. Periodistas de televisión, radio y diarios la contactaron para entrevistarla y fue gracias a ese impacto en los medios de comunicación que su cuenta de Instagram creció exponencialmente. “A partir de esto, me ofrecen dar talleres en departamentos del interior del país”, recuerda, no sin pasar por alto los tiempos difíciles que vinieron con la pandemia de Covid-19 que truncó hasta ahora esas posibilidades, aunque de a poco está comenzando a retomar los contactos en el interior.
Una parte importante de su trabajo a esta altura de su carrera laboral es la formación mediante talleres en distintas técnicas de bordado como Luneville, Goldwork, Zardozi y otros. Mucha de las personas que hacen los talleres buscan formarse en el tipo de trabajo que se puede ver en el perfil de Instagram @pedrería.uy o en la web pedrería.uy con strass, cristales, cristales facetados, perlas de vidrio, plata, lentejuelas, resinas opalinas y muchos materiales más aplicados a vestidos, tocados y toda una variedad de accesorios.
Colección de accesorios by Luján Soria
Respecto a los planes para este 2022, Luján nos anuncia entusiasmada el lanzamiento de una línea de accesorios propia a partir de la técnica francesa Luneville, con la que se bordan telas livianas con las que hará desde cintos, apliques, manguitas con distintos estilos, algunos con mucho brillo como prefieren las quinceañeras y otros más opacos como los que se usan para resaltar el blanco de los vestidos de novia.
Venta de insumos
Además de su destacado desempeño artesanal, Luján Soria también se dedica a vender insumos para bordar en distintas técnicas que pueden verse y adquirirse en pedrería.uy. Hotfix, perlas de vidrio, cristales facetados, alambre, strass, cristales engarzados e insumos para decoración de uñas, son entre otros, algunos de los materiales que se pueden conseguir. Entre sus clientes están colegas que bordan vestidos, tocados y accesorios, y también quienes se dedican a diseñar vestuarios para carnaval.