Quizás, algún que otro lector escuchó alguna vez la palabra Matcha, vio una foto de un polvo verde en Instagram o se topó de sorpresa con un helado de un extraño color verde fluorescente. Si algo de esto les suena conocido, no les resultará tan ajena la columna de este mes. Les voy a contar sobre un particular té verde que desembarcó en occidente pisando fuerte, es tendencia en Europa y EEUU y se está ganando un lugar en el paisito, el Té Matcha.
Quizás, algún que otro lector escuchó alguna vez la palabra Matcha, vio una foto de un polvo verde en Instagram o se topó de sorpresa con un helado de un extraño color verde fluorescente. Si algo de esto les suena conocido, no les resultará tan ajena la columna de este mes. Les voy a contar sobre un particular té verde que desembarcó en occidente pisando fuerte, es tendencia en Europa y EEUU y se está ganando un lugar en el paisito, el Té Matcha.
¿Qué es el Matcha?
El Matcha es un té verde en polvo, aunque vale aclarar que no cualquier té verde se puede moler y transformar en Matcha. El cultivo y producción de este té requiere de un complejo proceso, el cual repercutirá finalmente en su sabor y en sus propiedades. Este polvo verde no solo se consume disuelto en agua caliente a los efectos de preparar un té, también se utiliza como ingrediente en la preparación de batidos, helados, tortas, chocolates, entre otros. Aportando su particular color y valor nutricional a nuestros alimentos. Pese a ser originario de China, fue Japón quien se especializó en su degustación y cultivo, y lo incluyó en su Ceremonia del Té. En estas ceremonias tradicionalmente se sigue un estricto protocolo, el té Matcha es preparado con humildad y dedicación con el fin de compartirlo con los invitados que asisten. Es así que se genera un clima de profunda armonía espiritual donde, parafraseando a Osho, la atención en el momento presente, el té y el silencio, son los protagonistas.
¿Cuáles son sus propiedades?
En cuanto a las propiedades del Matcha, la diversidad de estudios y la información abundan. Sin embargo, todos coinciden en que el Matcha tiene un alto nivel antioxidante, con resultados mucho mayores a los que se obtendrían si se infusionaran las hojas de cualquier otro té verde común. Eso se debe, entre otros motivos, a que en la producción del Matcha la hoja es convertida en un fino polvo y al beber el té la estamos consumiendo en su totalidad. Por otra parte, pese a que el nivel de cafeína es alto está nivelado por un aminoácido (L-Theanina)* presente en todos los tés, por lo que que funciona como un estimulante natural y favorece a alcanzar un estado de concentración libre de estrés.
* V. Bisogno y J. Pettigrew (2014): “L-theanina: es un aminoácido anti estrés, diferente de la cafeína, que se absorbe en el intestino delgado, actúa sobre los neurotransmisores y estimula a las ondas alfa que aumentan la actividad cerebral, mejoran el foco mental y la capacidad de concentración, al tiempo que permite que el cuerpo y el cerebro permanezcan calmados¨.
Bibliografía:
BISOGNO, V y PETTIGREW, J. (2014): “Manual del Sommelier de Té”.
OSHO (2001): “El arte del Té”
WEB: Aoi sitio
WEB: Mei Leaf