Algo que siempre hablamos con las prácticas Mindfulness es la creencia que se ha instalado de que todo siempre tiene que estar bien, de que si hay angustia o tristeza hay que taparla o huir.
Pero sabemos que no siempre todo está bien y en estas fechas especialmente se hace duro transitar un estado de duelo o de pérdida ( muerte, separación, enfermedad, temas laborales ). Desde una perspectiva Mindfulness aquí te dejo algunas ideas que pueden ayudar
ACEPTA LA TRISTEZA
Es un sentimiento como la alegría o cualquier otro pero intenta que no se apodere de todos tus pensamientos. Cuando la tristeza secuestra cada pensamiento, cada acción es cuando la mente confundida se torna reactiva.
TOMA CONCIENCIA DE TU CUERPO
Dedicá unos minutos para sentarte en silencio con tu tristeza, tomando contacto con tu respiración, sintiendo en qué lugar del cuerpo ese sentimiento impacta: la garganta, el pecho, la panza? Contacta con tu cuerpo y las sensaciones, respira y permite que tu mente vaya calmándose.
AGRADECE LO BUENO QUE HAY EN TU VIDA
Una mente calmada, despierta, permite que te des cuenta de lo demás que está en este momento en tu vida, además de tu tristeza. ¿Personas que te quieren, tu mascota, tu jardín en flor, la posibilidad de caminar por la playa? Así como en la película Intensa-mente, la tristeza está pero es balanceada por la alegría, no te pierdas de esas pequeñas o grandes cosas y agradecé tenerlas y disfrutarlas.
PRACTICA LA EMPATIA Y LA SOLIDARIDAD
Muchas veces ayuda a transitar estos momentos de pérdida el compartir con otros lo que tengas. Quizás sea tu tiempo, una donación, una llamada de teléfono a alguien que tenés abandonado.
Estate aquí y ahora, presente, sin rechazar, aceptando TODO lo que llegue en este momento: tristeza y alegría, soledad y abrazos, oscuridad y luz.