Fotos: Virginia Zabaleta
Alexandra y James se conocieron en Londres, donde ambos residen y trabajan. La familia de la novia es originaria de Punta del Este, y eso motivo que la pareja decidiera celebrar una «boda de destino» en ese lugar, congregando familiares y amigos que viajaron desde todas partes del mundo, ya que el padre de Alexandra es diplomático y la familia vivió en numerosos países a lo largo de su carrera.
Antes de la Boda
La novia eligió realizar la previa en ENJOY Punta del Este, un lugar inigualable con excelentes vistas de la bahia.
Una cita obligada: Torres Imperiale
Las torres fueron construidas donde se ubicaba el ex Hotel Playa, perteneciente a la familia Sader, y Alexandra deseaba recordar las tradicionales arcadas del hotel que pertenecía a sus antepasados, convirtiéndose el lugar en una parada obligatoria de los exteriores de los novios.
La ceremonia religiosa tuvo lugar en La Candelaria.
Festejar hasta el amanecer.
La larga velada tuvo lugar en Piperina, a metros de distancia, donde los anfitriones brindaron una tradicional cena con emotivos discursos, y bailaron hasta la madrugada junto a su íntimo y cosmopolita grupo de invitados.
Fotos: Virginia Zabaleta